Especializados en acciones formativas singulares y coaching, facilitamos el desarrollo de las competencias necesarias para que una persona se sienta más capaz de alcanzar los objetivos que se propone. Sentirnos capaces hace que nos sintamos con el control de qué hacer en una situación; y eso está en la base del bienestar personal y, como consecuencia, del éxito profesional.

martes, 23 de marzo de 2010

Especial

10 ideas para generar emociones capacitantes

Te proponemos 10 ideas - coach para dar fuerza a las emociones que te hacen ser más capaz.

“Si es la razón la que hace al hombre, es el sentimiento quien lo dirige”, Rousseau

Las emociones que promueven una mayor sensación de capacidad son la alegría y la aceptación. La alegría nos genera optimismo y la aceptación confianza. Renny Yagosesky, Escritor y Orientador de la Conducta, sugiere para alcanzar la alegría, hay que incrementar las actitudes de gratitud y optimismo, y para desarrollar serenidad (aceptación) aboga por aprender neutralidad o bajo juicio, y relajación frecuente.

Nuestra propuesta de 10 ideas - coach es la siguiente:

1. REVIVE SITUACIONES EN LAS QUE TE SENTISTE PLENAMENTE CAPAZ, EN UN ESTADO DE “FLUIR”: Recuerda un momento en el que estuviste relajado, en un estado de “fluidez", plenamente capaz de conseguir algo, y trata de revivirlo con todas sus sensaciones. La Programación Neurolinguística nos ha dado las pautas concretas para revivir las situaciones sensorialmente y llevarlas a nivel conductual. De esta manera, activas a tu organismo para que se disponga en la misma situación. Cuantas más veces lo hagas, más fuerte es el camino neural que se forma y más fácil le resulta a tu cerebro encontrarlo y termina por ser una forma habitual de estar.
2. IMAGINA LOS SENTIMIENTOS QUE TIENES CUANDO TE SIENTES CAPAZ: Las neuroimágenes funcionales nos han mostrado cómo al imaginarnos una situación activamos las mismas áreas cerebrales que se activan cuando estamos de verdad ante esa situación. Esto significa que simplemente con imaginarnos sintiéndonos capaces, con todos los matices sentimentales que deseemos: pletóricos, contentos, tranquilos, excitados, emocionados, entusiasmados, en equilibrio, “en la zona”, … estamos provocando en nuestro organismo la liberación de las sustancias químicas vinculadas a esos elementos, y por lo tanto sintiéndonos así.
3. PLANTÉATE EXPECTATIVAS NUEVAS: Lo que pensamos influye directamente sobre nuestras emociones y por lo tanto sobre lo que somos capaces de hacer. Las zonas cerebrales encargadas de la percepción están directamente conectadas con los circuitos neuronales de la emoción y contienen “memorias emocionales” de experiencias previas. Como consecuencia de ello, tendemos a estancarnos en ellas y a percibir lo que ya hemos visto, a hacer lo que ya hemos hecho y a pensar como hemos pensado. Además, nos cuesta plantearnos que la realidad que percibimos podría ser percibida de forma diferente. De ahí la importancia y la dificultad de mirar con nuevas perspectivas y plantearnos expectativas nuevas. Sin embargo, el reto es pensar en que somos capaces de hacer cosas nuevas o con niveles mayores de excelencia. Para ello se preparan con un entrenador mental los grandes deportistas.
4. DESCRIBE TUS METAS CON PALABRAS CARGADAS DE EMOCIÓN CAPACITANTE: Utiliza numerosas palabras cargadas de sentimientos que para ti sean significativas cuando te plantees la meta que quieres alcanzar. Escribe cómo te sentirías cuando lo hayas alcanzado. Puedes combinarlo con visualización. Al escribirlo implicamos a más zonas del cerebro con el compromiso de alcanzar la meta.
5. IDENTIFICA LOS FRENOS: A veces generar emociones capacitantes supone sustituir las emociones que estaban precisamente surtiendo el efecto contrario, incapacitándonos. Con frecuencia hay que actuar expresamente para identificarlas. A nivel cognitivo, se analizan las creencias y mandatos que están asociados y se les cuestiona con el fin de invalidarlos.
6. IDENTIFICA LOS PERMISOS QUE TE DAS: ¿Cuál es el diálogo interno que mantienes contigo mismo? ¿Te consideras digno de “ser capaz”?, o por el contrario, ¿crees que no te lo mereces? La autoestima está en la base. Y a veces, a donde hay que mirar primero es a la imagen que tenemos de nosotros mismos y al valor que la damos.
7. TOMA CONSCIENCIA DE TU POSTURA CORPORAL: Una información de primera. El cuerpo muestra nuestras emociones. Hay que tomar consciencia de cuál es la postura, la expresión, el equilibrio con el que estamos y cuál es la que asociamos a estados de capacidad. La conclusión es sencilla: practicar la disposición corporal para reforzar el bucle mente – cuerpo y consolidar el estado capacitante.
8. EQUILIBRA TU ENERGÍA: Cada vez le damos más importancia a la energía de nuestro organismo, porque revela la química que tenemos. Hay numerosas técnicas para trabajar la energía. Todas pasan por algún tipo de trabajo físico. La que no puede faltar es la respiración. Respirar para centrarnos: lenta relajada, abdominal.
9. EMPIEZA A ACTUAR COMO SI... Empieza a actuar "como si" fueras capaz. Muéstrate confiado en que eres capaz, y tu cuerpo y tu mente aprenden a adoptar esta estrategia como habitual.
10. DECLÁRALO: Declarar “soy capaz”, “puedo”, decirlo en alto, utilizar la fuerza de la palabra para reforzar nuestros pensamientos y comprometernos con ello.


La sonrisa cuesta menos que la electricidad... Y da más luz"
(Proverbio escocés)

2 comentarios:

gema dijo...

Gracias chicas por este post!! lo necesitaba realmente.. a veces me siento desbordada y me entran los miedos pero después de leer vuestros consejos voy a por todas!! Un abrazo.

grupo tbc-aranda dijo...

Gracias a tí, Gema. Por seguirnos... Otro abrazo fortísimo también para tí, de Isabel y Jane