Especializados en acciones formativas singulares y coaching, facilitamos el desarrollo de las competencias necesarias para que una persona se sienta más capaz de alcanzar los objetivos que se propone. Sentirnos capaces hace que nos sintamos con el control de qué hacer en una situación; y eso está en la base del bienestar personal y, como consecuencia, del éxito profesional.

viernes, 25 de marzo de 2011

Para ampliar tu mapa...

En el mapa de mí mismo hay miedos, prohibiciones, presiones, limitaciones en definitiva, asimilados la mayoría de las veces de forma inconsciente a lo largo de mi existencia y que delimitan mi capacidad de acción

Algunos de ellos me han servido para ser aceptado por los demás, para evitar riesgos, para tomar decisiones, puede que hayan marcado de forma definitiva lo que he hecho en mi vida. Me llevan a “reaccionar” ante lo que ocurre: acción – reacción sin espacio para la elección, sin posibilidades de cambiar mi respuesta automática. No es que tenga límites, es que ellos me tienen a mí.

Muchos de nuestros coachees estaban así, “tenidos por sus límites inconscientes”, guardados por fieros dragones que les generaban temor. ¿Qué les llevó a explorarlos? En parte la insatisfacción, la incomodidad consigo mismos y en parte los deseos de ir más allá, de ampliar su mundo.

Esos límites de nuestros mapas son dragones acechantes que se hacen patentes a través de nuestros sentimientos, de nuestras acciones y de nuestras palabras. Hay dragones anclados en emociones que nos atemorizan extremadamente. Pero también hay dragones ágiles y dañinos dragones de creencias que se manifiestan en nuestras palabras una y otra vez provocando ansiedad, impotencia, baja estima, entre otras consecuencias, y en definitiva constriñen nuestra mente, nuestra acción y nuestro sentir.

Algunos ejemplos del lenguaje que nos limita son las sobregeneralizaciones: cuando una generalización como “hay que hacerlo bien” la convertimos en una regla absoluta que nos gobierna como un tirano y nos lleva a ser perfeccionistas, y hasta tal vez, intolerantes con los que no actúan igual.

Otro ejemplo son las generalizaciones universales: siempre, nunca, todos, nada, todo..., que nos llevan a declaraciones como “siempre me pasa a mí”, “todos tienen más suerte que yo”, “siempre tengo que hacerlo yo todo”,…

¿Qué puedo hacer cuando esto es lo que me digo?

Y hay más, el magnificar o exagerar un suceso para convertirlo en algo mayor o menor, pero siempre a peor: “es inaceptable que haga eso”; las conversaciones circulares con uno mismo en las que no hay respuesta, simplemente mensajes del tipo “qué mala suerte tengo”; la personalización con la que asumimos la responsabilidad ante sucesos negativos cuando no hay datos para ello “Es culpa mía. Tenía que haber hecho algo”; los mandatos “debes, “no puedes”, ”tienes que”... que condicionan nuestra acción “debes hacerlo porque es tu obligación” “tienes que aguantarte con lo que ocurre”, “no puedes dejar de...”, y la aceptación incondicional de fuentes no validadas, dando por verdades las opiniones o consejos distorsionados por las percepciones de otras personas.

Son ejemplos que ilustran los límites que nos marcamos en nuestro pensamiento, límites inconscientes, automáticos que nos inducen a reaccionar.

Pero las personas podemos ampliar nuestra consciencia, darnos cuenta de qué nos limita y decidir qué hacer con ello. Y a juzgar por el éxito del Coaching, parece que sea más fácil eliminar estas barreras con su ayuda

Cada vez son más las personas que recurren repetidas veces a un Coach para que les facilite el camino en sus decisiones y en su crecimiento personal. Son personas que han podido comprobar lo que les supone eliminar sus dragones y ampliar su mapa.

“Entre estímulo y respuesta hay un espacio. En ese espacio se halla nuestra libertad y nuestro poder de escoger la respuesta. En nuestra respuesta descansa nuestro crecimiento y nuestra felicidad”
Viktor Frankl (1905-1997)

Os dejamos además un vídeo excepcional, que juega con la palabra "miedo" en inglés: FEAR, otorgándole un nuevo significado:
Falsa Evidencia que en Apariencia es Real
 

2 comentarios:

José Luis dijo...

Enhorabuena por el post
Y gracias por el vídeo
Un abrazo

Jane Rodríguez del Tronco dijo...

Muchas gracias, José Luis. Nos alegra que te haya gustado, post y vídeo. Lo cierto es que nos ha parecido tan ilustrativo...
Otro abrazo para tí!